«-En tal caso, el arte mimético está sin duda lejos de la verdad, según parece; y por eso produce todas las cosas pero toca apenas un poco de cada una, y este poco es una imagen. Por ejemplo, el pintor, digamos, retratará un zapatero, a un carpintero y a todos los demás artesanos, aunque no tenga ninguna experiencia en estas artes. No obstante si es un buen pintor, al retratar a un carpintero y mostrar su cuadro de lejos, engañará a niños y hombres insensatos, haciéndoles creer que es un carpintero de verdad. (…) La pintura y en general todo arte mimético realiza su obra lejos de la verdad, y (…) se asocia con aquella parte de nosotros que está lejos de la sabiduría y que es su querida y amiga sin apuntar a nada sano ni verdadero.
-Absolutamente de acuerdo.
-Por consiguiente el arte mimético es algo inferior que conviviendo con algo inferior, engendra algo inferior.
-Así parece.
-¿Y esto lo decimos solo de la imitación que concierne a la vista, o también de la que concierne al oído, a la que llamamos «poesía»?
-Probablemente también de esta.
Platón (Siglo IV a.C.) República, X.